Hoy miré el programa de Lanata (Nietzsche dice que el sacrificio perfecciona; en eso estoy: ojalá tenga razón, porque ¡qué dura es la virtud!):
Según la Ocaña, Mariano cobra tres millones de pesos al año por sus trabajos. Cualquier CEO de corporación de cualquier clase gana lo mismo, pero en dólares.
Y nadie se escandaliza, aunque entre ellos están los que llevan a la quiebra a financieras que estafan a millones de modestos ahorristas privados. Esta omisión (una mentira como un rancho) no es pintoresca como las de Landriscina: es una ruleta trágica, porque siempre se está hablando de nuestro dinero, del mío, del tuyo, del que te matás sufriendo para alcanzar la virtud nitzcheana, aunque sos uno de los millones de laburantes que dan de comer a los ricos sin más retorno a tu sacrificio que la supervivencia.
Pero más de cuatro giles se creen que es el Estado el que se roba su prosperidad.
¿Porqué ocurre esto? Pibe, abrí el ojo, que el tallador tiene mucha experiencia: se está escondiendo la mano del que da las cartas.
En lo que a mí concierne, que viajo bastante por mis trabajos, aunque no se de finanzas ni de otras ciencias ocultas que se practican en la televisión, inerme pasajero, desprevenido en este torneo de mentiras u omisiones culpables, Aerolíneas Argentinas me lleva y me atiende mejor que nunca (a esto le llaman conocimiento empírico, base de toda comprobación científica, no?).
Si vos no viajás en avión, como el noventa por ciento de los argentinos, cuidate, que te están engrupiendo. No compres basura.
Si en verdad te subís a las naves de Aerolíneas, te saludo, feliz compañero de viaje.
Muchos cariños a los que sí.
A los que no, en cuanto tengan ocasión, compruébenlo, que cada días más argentinos pueden pagarse un pasaje para viajar por nuestra línea de bandera, que creó Perón y que destruyeron los que hoy son dirigentes de la oposición al gobierno, como el mercenario Lanata, triste resabio de su pasado, y la na/td/a tontita, falsa Mimí, Graciela Ocaña, que apuestan al fracaso del Estado.
¿Y porqué van mentir?, nada: son empleados de la llamada “iniciativa privada”.
Si el país hace negocio, para estos sujetos no es negocio.
Sencillito. Aerolíneas, claro, a ellos no les paga.
Adivina adivinador: ¿dónde cobran?
Ernesto Jauretche
05/11/12
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