categoría de Beato al ex Papa Juan Pablo II . Llegó a ese lugar a
fuerza de milagros.
El flamante Beato encabezó la restauración conservadora de la Iglesia
desandando el camino de "la opción por los pobres" trazada por Juan
XXIII.
El flamante Beato no quiso investigar la extraña muerte de su
antecesor, Juan Pablo I, que en treinta y tres días de Papado ya
había empezado a descubrir los lazos de las finanzas vaticanas con la
corrupción del Banco Ambrosiano y la Logia P2.
El flamante Beato desprestigió con su Departamento de la Fe (ex
Inquisición)a los Obispos y Sacerdotes de la Teología de la Liberación
castigando al gran teólogo Leonardo Boff con un año de "silencio
obsequioso" (prohibición de dar opiniones): Boff se fue con su
sabiduría a otra parte.
El flamante Beato recibió a unos pocos obispos argentinos que
viajaron a Roma durante la dictadura para denunciar las desapariciones
que ocurrían en todo el país y como toda respuesta les dijo : Si son
comunistas nada puedo hacer. Y no hizo nada.
El flamante Beato guardó bajo la alfombra roja a los cientos de curas
pedófilos que arruinaban la vida de chicos y jóvenos alrededor de todo
el mundo. Cuando la olla estalló dijeron que había tratado de evitar
el "escándalo".
La jerarquía Vaticana necesita de un milagro para convertirlo en
santo. Quizá suceda ese milagro. Quizás Jesucristo regrese a la tierra
y los eche a latigazos del templo.
Por Juan Pedro Mc Loughlin.
docente, escritor y actor.
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