martes, septiembre 21, 2010

El caso tiene similitud con el de los hermanos Felipe y Marcela Noble Herrera: Las Abuelas anunciaron el nieto 102 logró recuperar su identidad ////

Publicado el 21 de Septiembre de 2010

 

El jóven de 32 años fue apropiado por un ex integrante de la Fuerza Aérea que se encuentra prófugo. Se negó a entregar voluntariamente material para el ADN, pero la justicia ordenó la requisa de sus prendas. Nació en la ESMA.

  En conferencia de prensa desde la sede porteña de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto anunció ayer al mediodía la recuperación del nieto número 102 por parte de la organización de Derechos Humanos. Se trata del hijo de María Graciela Tauro y Jorge Daniel Rochistein, ambos desaparecidos durante la última dictadura militar, quien nació en cautiverio en la ESMA en noviembre de 1977.
“Vamos a dar otra buena noticia, otro nieto recuperó su identidad”, inició la conferencia Carlotto, que hizo la presentación rodeada de Abuelas, nietos recuperados y del secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde. Si bien aclaró que no difundirá su identidad, ya que el joven se opuso al proceso judicial, aseguró esperanzada: “En corto plazo, va a encontrar ese abrazo con su familia y sobre todo con su abuela, Nelly Cecilia Wuiovich de Tauro, quien vive en Mar del Plata, pero no está bien de salud y que, como decimos las que todavía no hemos tenido la suerte de encontrar a nuestros nietos, queremos abrazarlos antes de irnos de este mundo.”
Según informó Abuelas, el viernes pasado el juez federal Rodolfo Canicoba Corral le comunicó formalmente a los abogados del joven el resultado positivo (99,99%) del entrecruzamiento de información genética que realizó el Banco Nacional de Datos Genéticos, luego de un ir y venir judicial que llevó más de ocho años.
En un caso similar al de Marcela y Felipe Noble Herrera, el joven de 32 años se negó a entregar muestras de sangre y saliva de manera voluntaria para realizar el análisis de ADN, por lo que el 10 de junio de este año Canicoba Corral, en una medida de último recurso, lo citó a su despacho y ordenó una requisa de cuatro prendas de ropa (medias, calzoncillo y remera) que luego utilizó el Banco para determinar su identidad.
Las comparaciones con el caso Noble no son arbitrarias. Luego de dos intentos del juez (en 2003 y 2007) por realizar una extracción compulsiva de sangre, ambos rechazados por la Corte Suprema, en 2008 Canicoba Corral ordenó un allanamiento en la casa donde se secuestraron dos cepillos de dientes y dos calzoncillos, pero obtuvo resultados negativos. Abuelas denunció que el oficial a cargo de ese operativo es el mismo integrante de la Policía Federal que encabezó el allanamiento a la casa de los hijos adoptivos de Ernestina Herrera de Noble y que concluyó con ocho prendas contaminadas por ADN de varias personas. “Se fraguó todo, igual que en el caso de Herrera de Noble, o sea que hay complicidad de la Policía Federal”, aseguró Carlotto. El que estuvo a cargo de ambos operativos fue el subcomisario Carlos Garaventa, quien fue separado de su puesto la semana pasada por orden del ministro de Justicia, Julio Alak, a partir de la denuncia de Abuelas (ver aparte).
La causa se inició con la denuncia de Nelly Tauro, madre de María Graciela Tauro y abuela del joven recuperado, que es representada por la abogada Alcira Ríos. El apropiador, que durante la dictadura se desempeñó en la Fuerza Aérea en la Regional de Inteligencia Buenos Aires (RIBA), se llama Juan Carlos Vázquez Sarmiento y se encuentra prófugo de la justicia desde el 3 de octubre de 2006. “El nieto 102 salió de la ESMA en manos de este criminal. Es parte del aparato represivo”, opinó Carlotto.
Como figura en la causa, el militar retirado Julio César Lestón confesó que participó del operativo de detención de Graciela Tauro, que estuvo en cautiverio primero en el centro clandestino Mansión Seré y, pasados unos días, en la comisaría de Castelar, donde la trasladó él personalmente.
El mismo testigo agregó que “supo que las criaturas de las detenidas embarazadas –cuyos partos se efectuaban en la ESMA– se entregaban a distintas familias del personal de Fuerza Aérea”, y recordó que entre los que fueron favorecidos se encontraban el acusado y Francisco Gómez, con el hijo de Patricia Julia Roisinblit, la hija de Rosa Roisinblit, vicepresidenta de Abuelas.
“Respetamos su identidad, aunque sea falsa, y está en manos de la justicia para que recupere su documento verdadero”, dijo Carlotto, y señaló que el acercamiento con su familia deben hacerlo sus propios familiares, que estarán asistidos por la Comisión Nacional para el Derecho a la Identidad (CoNaDi), que tiene equipos de aproximación para acercarse a esos jóvenes. <

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails